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¿Cómo armar un plato balanceado sin contar calorías

Muchas personas piensan que para comer bien deben contar calorías y pesar cada alimento, pero esto puede volverse agotador y poco sostenible. La clave para alimentarte de forma saludable es aprender a armar un plato balanceado con la vista, escuchando tu cuerpo y combinando bien los grupos de alimentos.

 Problemas comunes cuando no equilibras tus platos

• Te da hambre rápido después de comer.

• Te sientes pesado, con sueño o inflamado.

• Comes más de lo que tu cuerpo necesita o menos y te quedas con hambre.

• No obtienes todos los nutrientes necesarios para tu día.

¿Cómo se arma un plato balanceado sin contar calorías?

1. Usa la regla del “plato saludable”

Mitad del plato: verduras o vegetales.

Lechuga, espinaca, brócoli, zanahoria, tomate, pepino, calabacín… mientras más colores, mejor.

Un cuarto del plato: proteína.
Pollo, pescado, carne magra, huevos, queso fresco, tofu o legumbres como lentejas y garbanzos.

Un cuarto del plato: carbohidratos complejos.
Arroz integral, pasta integral, papa, yuca, plátano, quinoa o avena.

2. Agrega grasas saludables en pequeñas cantidades

 Aguacate, aceite de oliva, semillas, nueces o maní sin sal.

3. Bebe suficiente agua durante el día

Evita bebidas azucaradas o gaseosas que aumentan calorías sin aportar nutrientes reales.

Soluciones prácticas

• Si comes fuera de casa, prioriza pedir un plato con verduras y proteína antes de agregar carbohidrato.

• Si no hay verduras, pide ensalada extra o lleva la tuya.

• Aprende a escuchar tu saciedad. Come lento y detente cuando ya no sientas hambre.

• Usa platos medianos o pequeños para evitar comer más de lo que necesitas.

No necesitas ser nutriólogo ni contar calorías para alimentarte bien. Con la regla del plato balanceado, tu cuerpo recibe la energía, vitaminas, minerales y proteínas que necesita para funcionar, estudiar, hacer ejercicio y descansar mejor.